S.N. Nº 65
Caí en unas redes que pensé, ya conocía,
Pero no, era muy poca mi sabiduría;
Perfectamente era un ignorante,
Quedé atrapado, pero forcejeo para ir hacia adelante.
No me muevo de mi lugar, lo sé…
Me quedé pegado en esta red,
Que simula ser un cómodo colchón,
Pero sé perfectamente que es una hermosa prisión.
Pero esta prisión, me incita a querer salir,
Me satura de ideas que circulan sobre mí…
Pero me llena de pensamiento referentes a esa niña,
Que de nada, me alucina.
Y me mantengo al filo de la locura,
Sigo pisando la cuerda floja de la compostura;
Que sin tener firmeza, me mantiene en el aire,
Que sin decir nada, de a poco me vuelve nadie.
Pero si tuviera la posibilidad de sobornar mi corazón,
Lo haría, pero para poder quererla más,
Para degustar mi agonía
Y de paso exprimir el jugo de mi plusvalía.
Que se ha materializado gracias a usted,
Valgo más de lo que pensé gracias a usted…
No sabía bien que tanto podía pesar en corazón,
Pero el esperado que tenía, se fue más allá de mi razón.
Estoy separado por kilómetros a lo que decía ser mi realidad,
Estoy presenciando el mecanismo que permite que no sea sólo soñar,
Caí presa de un conjunto de llaves alzadas a nada,
Pero que poseía entremedio, la llave de mi descontrolado karma.
Ahora, sin controlarme pienso en querer,
Sin entender porque, siento que la puedo ver…
Sin cerrar los ojos, sueño estando a su lado,
Sin deprimirme, me siento desconsolado.
El huracán de mis sentimientos es fuerte,
La lluvia de talento es creciente,
La marea de sueños, sigue subiendo
Y sin sentirla cerca, siento que de a poco voy pereciendo.
Joango.